(72) Mi pequeño.

Un día decidí querer a alguien, pero pensé, y preferí no volver a sufrir, así que decidí querer a algo. No tenía dinero ni ganas de tener una mascota. Y decidí rescatar el portátil del fondo del cajón, quitarle el polvo y ver como iba la red por esos tiempos. Y cuando al fin me centré, encontré Blogger. De ahí salió mi pequeño, lo quería como si me hubiera estado esperando todos estos años. De ahí salió On the phone. Poco después, todos mis pensamientos estaban guardados en el. Y ahora, estoy publicando aquí, para no dejarlo solo, el pequeño On the phone, que poco a poco se va haciendo grande gracias a sus seguidores.
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Os preguntaréis a que viene ese post. Pues bien, ahora mismo posteo en mi entrada ¡número 100! así como lo oyen. Ya llevamos cien pequeñas entradas, y pronto serán doscientas, trescientas... ¿Qué importa el número? Lo que importa es que este blog ahora es parte de mi, y ojalá lo siga siendo siempre.