(18) Amigas, sí, ésas.

Amigas, sí, esas que te sacan las sonrisas en los peores momentos, esas a las que te faltarían vidas para darles las gracias, esas que guardan tus secretos a pesar que la gente cotillee, amigas, esas personas que nunca querrás perder en tu vida, y que cuando las pierdes dejan en ti un vacío tan grande, tan inmenso, que es casi insoportable, pero sobretodo esa personas que a pesar de sus problemas intentan solucionar los tuyos. Yo por suerte, puedo presumir de tener ese tipo de amigas que aun que tengan sus problemas me ayudan con los míos, que a pesar de mis lágrimas me sacan una sonrisa, que siempre están a mi lado, y que por supuesto son mis compañeras de locuras. Tengo que agradecer que las tengo, y a las que se marcharon de mi vida, también les tengo que agradecer, porque han demostrado que a pesar de que se tuvieron que marchar, siguen ayudándome en la distancia, siguen dándome su apoyo y su sinceridad.

Esas amigas con las que pase sin duda los mejores momentos de mi vida, sin que ningún chico pudiera entrometerse en ese mágico momentos de amistad, entre personas que comparten un mismo pensamiento, el pensamiento más mágico, sincero, atrevido, loco, divertido y a veces triste, que es el pensamiento de la amistad eterna, un pensamiento que pocas personas pueden presumir de haber tenido, ya que la mayoría de amistades a la larga o a la corta se rompen, pero mira el mio no se a roto, sigue en pie, intacto, tan duro y resistente como una gran piedra, que nada podría romper, ellas.... cada una en una punta del mundo, diferentes países, diferentes continentes, pero eso sí, el mismo pensamiento. El momento del reencuentro será tan especial que nadie, nunca se lo podrá imaginar. Yo... aquí en el mismo lugar donde nos conocimos, donde nos convertimos en amigas, y donde nunca olvidaremos que siempre nos encontraremos con nosotras mismas, porque cuando estábamos juntas, podíamos ser eso, nosotras mismas, sin problemas, sin ambiciones, sin nada que pudiera hacer que nos separásemos, sinceramente, estoy agradecida a ellas, porque ellas me convirtieron en la persona que soy ahora, y que no mucha gente conoce la verdad.

Pero ¿ saben qué?.. cuando ellas se marcharon pensé que me quedaría sola, pero me equivoqué, nunca estaré sola, porque puedo contar con más amigas no muchas más, las podría contar con una mano, pero las tengo hay, el resto de personas, están como bombillas parpadeantes, hay veces que las tengo y otras que no, por eso simplemente, puedo decir que son conocidas, que me ayudan de vez en cuando y a las que también les estoy agradecidas..